
La plaga no es de a gratis: se dice que los monos tomaron las calles al ser desplazados de su hábitat natural por culpa de la urbanización. O sea que nuevamente estamos ante un serio problema ecológico provocado por la actividad humana. Pero no se preocupen, ya encontraron una solución: llenar la ciudad de langures, que son unos changos más grandes y amenazantes pero que tienen la virtud de estar tan, pero tan feos que aterrorizan a los macacos nomás de verlos. También a la gente, pero parece que es lo de menos. Imagino que si crece mucho la población de langures van a tener que llenar las calles de babuinos para que los mantengan a raya. Si estos se salen de control también, pues habrá que soltar orangutanes. Estos se controlan fácilmente soltando gorilas. Y si los gorilas comienzan a amenazar a la gente no habrá problema. Ya para entonces los chimpancés se van a haber hecho suficientemente inteligentes como para haber encabezado triunfalmente una rebelión contra la humanidad, por lo que la plaga para ese momento vamos a ser nosotros.
Ah, qué cosas. Ojalá que no les salga peor el remedio que la enfermedad. Si no, que le pregunten a los Australianos cómo les fue con los conejos y con los gatos y con los sapos y con... bueno. De todas maneras habrá que estar al pendiente de cómo les funciona este operativo, igual y acá también la solución a nuestro problemita podría ser llenar de langures el Eje Central.

1 comentario:
Esas soluciones me recordaron a cierto capitulo de los Simpsons donce usan a unas lagartijas para controlar la plaga de palomas, y de ahi creo que seguian unas serpientes para las lagartijas, después algun primate y la solucion final era el invierno en springfield el cual los haria huir a las montañas o morir congelados...
Vaya cosas con los changuitos entonces.
Publicar un comentario