
A mi siempre me ha dado algo de pena ajena la ufología obsesiva, al estilo de nuestro cazavampiros de región 4, Jaime Mausán. Sobretodo porque los ufólogos son el mejor ejemplo de lo que pasa cuando no se aplica el principio del Rasero de Ockham. Este principio dice que, ante un problema determinado, la mejor solución es la más simple.
Imaginemos por un momento que nos encontramos unos árboles carbonizados en medio del desierto, y tenemos elementos para inferir que el evento que provocó esa carbonización ocurrió hace aproximadamente 60 años. Tenemos dos respuestas posibles ante este misterio: a) Hace aproximadamente 60 años, un rayo cayó en un árbol, provocando un pequeño incendio que se extendió a otros árboles cercanos. b) una nave espacial tripulada por extraños hombrecillos grises procedentes de las Pléyades se estrelló en este punto hace 60 años, carbonizando la vegetación circundante. La nave fue recogida en secreto por el ejército de los Estados Unidos y desde entonces el Gobierno lleva a cabo una campaña sistemática de encubrimiento por temor a que este conocimiento llegue a las manos equivocadas.
Por alguna extraña razón, los ufólogos siempre consideran que la segunda explicación es la más probable. Imagínense, si llegan a esas conclusiones a partir de unos árboles quemados... ¿a qué conclusiones podrían llegar con fotos como éstas?

Antes de que se alboroten, les voy a comentar que la primera es una foto de una sonda Viking esperando ser recuperada, tomada en el desierto de Nuevo México en 1972. La segunda es una foto de 1945 de uno de los proyectos más extraños de Hitler: Haunebu II, el OVNI Nazi.
Imaginemos por un momento que nos encontramos unos árboles carbonizados en medio del desierto, y tenemos elementos para inferir que el evento que provocó esa carbonización ocurrió hace aproximadamente 60 años. Tenemos dos respuestas posibles ante este misterio: a) Hace aproximadamente 60 años, un rayo cayó en un árbol, provocando un pequeño incendio que se extendió a otros árboles cercanos. b) una nave espacial tripulada por extraños hombrecillos grises procedentes de las Pléyades se estrelló en este punto hace 60 años, carbonizando la vegetación circundante. La nave fue recogida en secreto por el ejército de los Estados Unidos y desde entonces el Gobierno lleva a cabo una campaña sistemática de encubrimiento por temor a que este conocimiento llegue a las manos equivocadas.
Por alguna extraña razón, los ufólogos siempre consideran que la segunda explicación es la más probable. Imagínense, si llegan a esas conclusiones a partir de unos árboles quemados... ¿a qué conclusiones podrían llegar con fotos como éstas?


1 comentario:
Los humanos somos muy credulos, imaginate hay gente que cree en el america, en Jebus (jejeje) y otras cosas, por que no crer en ovnis???
que te extraña?
Curiosamente a tu post el rasero de ocham lo utilizo Carl Sagan en su libro Contacto, el cual algunos productores de Hollywood con ayuda de Jodie foster se encargaron en darle en la madre al libro y a la historia, ellos creyeron que hacian bien.
Voy a terminar mi comentario diciendo "El respeto al delirio colectivo ajeno, puede ser muy divertido"
Saludos
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