
Ustedes me disculparán, pero no he tenido cabeza para buscar nada interesante en estos días.
Cada quien toma de diferente manera el tema del envejecimiento, pero para algunas personas es muy difícil aceptarlo. Mi abuela es una de esas personas. Aunque le tenemos mucho cariño, cuidar de ella ya es un trabajo de tiempo completo... y cada vez se volvía más difícil, pues ella decía que no necesitaba medicinas, que estaba perfectamente bien y que podía valerse perfectamente por sí sola. Aunque amanecía llena de moretones por caerse en la madrugada, estaba convencida de que vivimos en mil novecientos ochenta y tantos, amenazó con un palo a la señora que nos ayuda en la casa, y llevaba meses enojada con mi madre desde que "le hablaron los de Recursos Hidráulicos porque ganó un premio" pero no la dejaron ir a cobrarlo.
En fin... el caso es que ayer la tuvimos que llevar a una casa de retiro. Primero muerta que en un asilo, nos ha dicho muchas veces... así que por recomendación de su doctor, para llevarla tuvimos que engañarla haciéndole creer que iba a hacerse unos estudios. Yo personalmente tuve que llevarla de la mano hasta su recámara y dejarla ahí sin poder despedirme. Racionalmente, estoy convencido de que fue lo mejor. Sin embargo, no puedo dormir. Siento que la he traicionado.